El milagro de tu llegada...

Sos un milagro Alma, lo fuiste desde antes de estar en mi panza. Y aunque al principio parecía que no, hoy comprendo que me preparaste para tu llegada.
Llenaste mi vida de ÁNGELES para garantizar que al nacer recibieras todo el AMOR que una criatura tan perfecta como vos se merece.

Así fue que pusiste en mi vida a ese ángel llamado Gastón, al que vos llamas Papá.
Lo elegiste por su corazón sensible y su fortaleza.
Sabías que a la hora de anunciar tu llegada el sería el primero en decirme que juntos y con amor, podíamos superar cualquier obstáculo. Y así fue.
Tu llegada hizo nuestro amor mas fuerte y sos lo que nos une de por vida. Nos hiciste crecer, madurar y sentir lo que es la verdadera felicidad y el verdadero amor.

Están esos ángeles llamados Abuelos Marce y Richi. Esas 2 personitas que se desviven por vos, y que te disfrutan tanto que da placer verles las caras de felicidad.
Tu llegada me hizo comprender que mas allá de errores o aciertos hicieron siempre lo que les parecía mejor para mi vida. Pero jamas me dieron la espalda. Por eso hoy se ganan mi respeto, valoración y admiración porque entiendo lo que es un hijo. Y los comprendo como padres reconociendo mis errores como hija, y se que ellos entienden que yo también hice siempre lo que pude como tal.

Están los otros Abus Mary y Abel, que no solo acompañaron a tu papá. También me abrieron su corazón a mí, me hicieron parte de su familia y me dieron todo su respeto. Conté con ellos desde un primer momento, y en cada una de las ocasiones que los necesite los tuve ahí conmigo.
Tu llegada me regalo eso. Unió dos familia con un enorme amor a la vida en si y a la familia.

Están los hermanos y amigos que se mantuvieron firme y nos dieron su apoyo. Nos acompañaron en los momentos difíciles y festejaron los momentos hermosos como lo fue tu nacimiento.
Tu llegada me demostró quienes eran los amigos verdaderos, y cuales los que se esfumaban al asomarse el primer nubarrón.

Todos estos ÁNGELES nos los regalaste vos Alma, todo ese AMOR lo trajiste vos.
Así como trajiste ALEGRÍA, FELICIDAD y esa sensación de que después de una sonrisa tuya, lo demás no interesa.
Día a día me haces CRECER, me haces más FUERTE, me enseñas que es lo que realmente importa en la vida.

Almi, gracias por estos ANGELITOS que de ahora en más son tuyos y estan para cuidarte y quererte a vos.

Te ama...

Mamá